Bambino, su muerte, su entierro
Y, como tenía que suceder, el día cinco del mes cinco, cuando las manillas del reloj de la muerte buscaban esa hora lorquiana de los clarines del miedo de las cinco de la tarde, en su cama del polígono El tinte de casa de su hermana María-siempre a su lado-, Bambino miró detenidamente a ésta, […]